Presencial Septiembre

Fecha

16 de Septiembre – 9 de junio

Duración

Taller semanal todos los lunes

Horarios

16:00 – 17:30 Secundaria
17:30 – 19:00 Bachillerato

Precio

900€

Fecha

16 de Septiembre – 9 de junio

Duración

Taller semanal todos los lunes

Horarios

16:00 – 17:30 Secundaria
17:30 – 19:00 Bachillerato

Precio

900€

Fecha

16 de Septiembre – 9 de junio

Duración

Taller semanal todos los lunes

Horarios

16:00 – 17:30 Secundaria
17:30 – 19:00 Bachillerato

Precio

900€

Método Silveira

Te preocupan los estudios de tu hijo. Está desmotivado y no se concentra o quizás estudia, pero echa demasiadas horas para los resultados que consigue.

Decirle que se ponga a estudiar, solo está empeorando la relación y no sabes cómo ayudarle. Lo primero que es ser conscientes de cuál es el problema. No es vagueza, no es desmotivación, ni se debe a la adolescencia. El problema es que no sabe estudiar.

Puede que te sorprenda porque eres de los que piensa que hacer resumenes, y repetirse el tema es saber estudiar. Pero la ciencia nos demuestra que ese método es como querer cortar un bistec con una cuchara; difícil, ineficiente y desmotivador en consecuencia.

Necesita un método que sea intrínsecamente estimulante para que su mente no necesite distracciones dopaminérgicas y que haga que cada minuto de estudio le cunda al máximo para que sus notas sean reflejo de su eficacia.

Mejoras

1. Tu hijo no sabe por dónde empezar a estudiar.
Con el método, aprende a organizarse solo y deja de improvisar.

2. Estudia horas… pero no se le nota.
Empieza a estudiar con estrategia y sus notas suben sin necesidad de estudiar más.

3. Ha perdido la confianza y ya no cree en sí mismo.
Recupera la motivación al ver que sí puede con lo que antes le bloqueaba.

4. No tiene hábitos ni constancia, siempre va a última hora.
Aprende a planificarse y a estudiar con tiempo, sin que tengas que recordárselo tú.

5. En casa todo gira en torno a que estudie… y aún así no arranca.
Deja de pelear con él por los estudios: empieza a responsabilizarse y tú respiras.

6. Lleva meses (o años) de clases particulares y sigue igual.
Por fin aprende a estudiar por su cuenta, sin depender de nadie.

Caso real: SALVA, 2º de Bachillerato

De repetir asignaturas a presentarse (¡y aprobar!) la selectividad en la primera convocatoria.
 
Cuando conocí a Salva en enero, estaba desmotivado. Le habían quedado varias asignaturas ese trimestre, y aún tenía materias pendientes del año anterior.
 
Su padre estaba desesperado. Discutían casi a diario: Salva sentía que se esforzaba, pero por sus resultados parecía que mentía. 
 
Vinieron desde lejos para hacer el curso presencial. Luego continuó online.
 
Lo primero fue desmontar su forma de estudiar: llena de atajos que no funcionaban. Poco a poco empezó a aplicar el Método Silveira y a ver resultados reales.
 
Al poco de empezar su padre me escribió esto:
“Muchas gracias por todo lo que estás haciendo por él. El cambio es increíble. Está mucho más enfocado en los estudios, y ahora sí piensa que lo puede conseguir. No sé cómo lo haces, pero funciona.”
– Padre de Salva
El conflicto en casa empezó a bajar, y él comenzó a confiar en sí mismo.
 
Recuperó todas las asignaturas. Se presentó a la selectividad, algo que ni él mismo veía posible a comienzos de curso…
 
Después su padre me escribió de nuevo:
Solo decirte que Salva ha aprobado todas. Ni él mismo se lo cree!
Muchas gracias por el trabajo que le has dedicado estos meses. El cambio ha sido muy bueno.

Lanzadera del método

Curso intensivo (2 días)

Saber cómo estudiar. Comprobar que funciona. Empezar a creer que pueden.

Durante dos días de trabajo teórico-práctico, los alumnos aprenden paso a paso la metodología del estudio eficiente basada en la psicología del aprendizaje.

No es un curso más sobre «técnicas de estudio».
Es una formación donde entienden el porqué de lo que hacen… y lo prueban por sí mismos.

Aprenderán:

  • Cómo mejorar la concentración (y sostenerla durante el estudio)
  • Cómo memorizar bien sin repetir como loros
  • Cómo estructurar lo que estudian para comprenderlo de verdad
  • Cómo preparar los exámenes sin dejarlo para el final
  • Y sobre todo, cómo tener un método claro y aplicable en su día a día académico

Todo lo trabajan con materiales estructurados que se les proporcionan: no solo lo entienden, sino que lo aplican mientras lo aprenden.

Al final del intensivo, no solo sabrán cómo estudiar mejor, sino que habrán empezado a hacerlo

Hábito maestro (3 meses de práctica semanal)

Saber no es suficiente. Lo que cambia la vida es hacerlo.

Después del curso intensivo, comienza lo más importante: convertir lo aprendido en hábito.
Porque estudiar bien no es una teoría, es una habilidad.
Y como el inglés o la natación, se entrena practicando.

Durante esta etapa, acompañamos a los alumnos en la implementación real del Método Silveira:

Les guiamos paso a paso mientras aplican las técnicas en sus propias asignaturas.

Revisamos cómo organizan su estudio, cómo repasan, cómo preparan los exámenes.

Detectamos errores, reforzamos lo que funciona y ajustamos lo que no.

No es lo mismo saber que implementar.
Y cuando algo se hace por primera vez, es normal sentirse inseguro o volver a los viejos hábitos.
Por eso no están solos: cada semana tienen una sesión de seguimiento donde resolvemos dudas, entrenamos estrategias y medimos avances.

Mentoría Personalizada (seguimiento adaptado al ritmo del alumno)

Porque después del cambio… toca mantenerlo y seguir creciendo.

Tras aprender el Método Silveira y empezar a aplicarlo, muchos alumnos sienten el primer despegue.
Pero cada uno tiene su ritmo, sus asignaturas y sus objetivos. Por eso, ofrecemos una mentoría semanal opcional, para quienes desean seguir mejorando paso a paso, con acompañamiento experto.

¿En qué consiste?
Una sesión semanal 100% adaptada a su situación académica real

Revisión de cómo está aplicando el método: organización, repaso, planificación

Resolución de bloqueos, ajustes finos y evolución continua